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HABACUB 3 Paralela rv60
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Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)


1 Oración del profeta Habacuc, sobre Sigionot.

2 Oh Jehová, he oído tu palabra, y temí. Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, En medio de los tiempos hazla conocer; En la ira acuérdate de la misericordia.

3 Dios vendrá de Temán, Y el Santo desde el monte de Parán. Selah Su gloria cubrió los cielos, Y la tierra se llenó de su alabanza.

4 Y el resplandor fue como la luz; Rayos brillantes salían de su mano, Y allí estaba escondido su poder.

5 Delante de su rostro iba mortandad, Y a sus pies salían carbones encendidos.

6 Se levantó, y midió la tierra; Miró, e hizo temblar las gentes; Los montes antiguos fueron desmenuzados, Los collados antiguos se humillaron. Sus caminos son eternos.

7 He visto las tiendas de Cusán en aflicción; Las tiendas de la tierra de Madián temblaron.

8 ¿Te airaste, oh Jehová, contra los ríos? ¿Contra los ríos te airaste? ¿Fue tu ira contra el mar Cuando montaste en tus caballos, Y en tus carros de victoria?

9 Se descubrió enteramente tu arco; Los juramentos a las tribus fueron palabra segura. Selah Hendiste la tierra con ríos.

10 Te vieron y tuvieron temor los montes; Pasó la inundación de las aguas; El abismo dio su voz, A lo alto alzó sus manos.

11 El sol y la luna se pararon en su lugar; A la luz de tus saetas anduvieron, Y al resplandor de tu fulgente lanza.

12 Con ira hollaste la tierra, Con furor trillaste las naciones.

13 Saliste para socorrer a tu pueblo, Para socorrer a tu ungido. Traspasaste la cabeza de la casa del impío, Descubriendo el cimiento hasta la roca. Selah

14 Horadaste con sus propios dardos las cabezas de sus guerreros, Que como tempestad acometieron para dispersarme, Cuyo regocijo era como para devorar al pobre encubiertamente.

15 Caminaste en el mar con tus caballos, Sobre la mole de las grandes aguas.

16 Oí, y se conmovieron mis entrañas; A la voz temblaron mis labios; Pudrición entró en mis huesos, y dentro de mí me estremecí; Si bien estaré quieto en el día de la angustia, Cuando suba al pueblo el que lo invadirá con sus tropas.

17 Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, Y los labrados 2 no den mantenimiento, Y las ovejas sean quitadas de la majada, Y no haya vacas en los corrales;

18 Con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación.

19 Jehová el Señor es mi fortaleza, El cual hace mis pies como de ciervas, Y en mis alturas me hace andar. Al jefe de los cantores, sobre mis instrumentos de cuerdas.

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1 Oración del profeta Habacuc. Según sigionot.

2 Señor, he sabido de tu fama; tus obras, Señor, me dejan pasmado.

3 De Temán viene Dios, del monte de Parán viene el Santo.

4 Su brillantez es la del relámpago; rayos brotan de sus manos;

5 Una plaga mortal lo precede, un fuego abrasador le sigue los pasos.

6 Se detiene, y la tierra se estremece; lanza una mirada, y las naciones tiemblan.

7 He visto afligidos los campamentos de Cusán, y angustiadas las moradas de Madián.

8 ¿Te enojaste, oh Señor, con los ríos? ¿Estuviste airado contra las corrientes?

9 Descubriste tu arco, llenaste de flechas tu aljaba. Selah

10     las montañas te ven y se retuercen. Pasan los torrentes de agua,

11 El sol y la luna se detienen en el cielo por el fulgor de tus veloces flechas,

12 Indignado, marchas sobre la tierra; lleno de ira, trillas a las naciones.

13 Saliste a liberar a tu pueblo, saliste a salvar a tu ungido.

14 Con tu lanza les partiste la cabeza a sus guerreros, que enfurecidos querían dispersarme,

15 Pisoteaste el mar con tus corceles, agitando las inmensas aguas.

16 Al oírlo, se estremecieron mis entrañas; a su voz, me temblaron los labios;

17 Aunque la higuera no florezca, ni haya frutos en las vides;

18 aun así, yo me regocijaré en el Señor, ¡me alegraré en Dios, mi libertador!

19 El Señor omnipotente es mi fuerza; da a mis pies la ligereza de una gacela