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JEREMIAS 29 Paralela rv60
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Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)


1 Estas son las palabras de la carta que el profeta Jeremías envió de Jerusalén a los ancianos que habían quedado de los que fueron transportados, y a los sacerdotes y profetas y a todo el pueblo que Nabucodonosor llevó cautivo de Jerusalén a Babilonia

2 (después que salió el rey Jeconías, la reina, los del palacio, los príncipes de Judá y de Jerusalén, los artífices y los ingenieros de Jerusalén),

3 por mano de Elasa hijo de Safán y de Gemarías hijo de Hilcías, a quienes envió Sedequías rey de Judá a Babilonia, a Nabucodonosor rey de Babilonia. Decía:

4 Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, a todos los de la cautividad que hice transportar de Jerusalén a Babilonia:

5 Edificad casas, y habitadlas; y plantad huertos, y comed del fruto de ellos.

6 Casaos, y engendrad hijos e hijas; dad mujeres a vuestros hijos, y dad maridos a vuestras hijas, para que tengan hijos e hijas; y multiplicaos ahí, y no os disminuyáis.

7 Y procurad la paz de la ciudad a la cual os hice transportar, y rogad por ella a Jehová; porque en su paz tendréis vosotros paz.

8 Porque así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: No os engañen vuestros profetas que están entre vosotros, ni vuestros adivinos; ni atendáis a los sueños que soñáis.

9 Porque falsamente os profetizan ellos en mi nombre; no los envié, ha dicho Jehová.

10 Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar.

11 Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

12 Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré;

13 y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.

14 Y seré hallado por vosotros, dice Jehová, y haré volver vuestra cautividad, y os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os arrojé, dice Jehová; y os haré volver al lugar de donde os hice llevar.

15 Mas habéis dicho: Jehová nos ha levantado profetas en Babilonia.

16 Pero así ha dicho Jehová acerca del rey que está sentado sobre el trono de David, y de todo el pueblo que mora en esta ciudad, de vuestros hermanos que no salieron con vosotros en cautiverio;

17 así ha dicho Jehová de los ejércitos: He aquí envío yo contra ellos espada, hambre y pestilencia, y los pondré como los higos malos, que de tan malos no se pueden comer.

18 Los perseguiré con espada, con hambre y con pestilencia, y los daré por escarnio a todos los reinos de la tierra, por maldición y por espanto, y por burla y por afrenta para todas las naciones entre las cuales los he arrojado;

19 por cuanto no oyeron mis palabras, dice Jehová, que les envié por mis siervos los profetas, desde temprano y sin cesar; y no habéis escuchado, dice Jehová.

20 Oíd, pues, palabra de Jehová, vosotros todos los transportados que envié de Jerusalén a Babilonia.

21 Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, acerca de Acab hijo de Colaías, y acerca de Sedequías hijo de Maasías, que os profetizan falsamente en mi nombre: He aquí los entrego yo en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, y él los matará delante de vuestros ojos.

22 Y todos los transportados de Judá que están en Babilonia harán de ellos una maldición, diciendo: Póngate Jehová como a Sedequías y como a Acab, a quienes asó al fuego el rey de Babilonia.

23 Porque hicieron maldad en Israel, y cometieron adulterio con las mujeres de sus prójimos, y falsamente hablaron en mi nombre palabra que no les mandé; lo cual yo sé y testifico, dice Jehová.

24 Y a Semaías de Nehelam hablarás, diciendo:

25 Así habló Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, diciendo: Tú enviaste cartas en tu nombre a todo el pueblo que está en Jerusalén, y al sacerdote Sofonías hijo de Maasías, y a todos los sacerdotes, diciendo:

26 Jehová te ha puesto por sacerdote en lugar del sacerdote Joiada, para que te encargues en la casa de Jehová de todo hombre loco que profetice, poniéndolo en el calabozo y en el cepo.

27 ¿Por qué, pues, no has reprendido ahora a Jeremías de Anatot, que os profetiza?

28 Porque él nos envió a decir en Babilonia: Largo será el cautiverio; edificad casas, y habitadlas; plantad huertos, y comed el fruto de ellos.

29 Y el sacerdote Sofonías había leído esta carta a oídos del profeta Jeremías.

30 Y vino palabra de Jehová a Jeremías, diciendo:

31 Envía a decir a todos los cautivos: Así ha dicho Jehová de Semaías de Nehelam: Porque os profetizó Semaías, y yo no lo envié, y os hizo confiar en mentira;

32 por tanto, así ha dicho Jehová: He aquí que yo castigaré a Semaías de Nehelam y a su descendencia; no tendrá varón que more entre este pueblo, ni verá el bien que haré yo a mi pueblo, dice Jehová; porque contra Jehová ha hablado rebelión.

  X


1 Y estas son las palabras de la carta que Jeremías el profeta envió desde Jerusalén al remanente de los ancianos de los desterrados y a los sacerdotes y a los profetas y a todo el pueblo, a quienes Nabucodonosor había llevado al destierro desde Jerusalén a Babilonia,

2 después que Jeconías el rey, y la dama, y los oficiales de la corte —los príncipes de Judá y Jerusalén— y los artífices y los constructores de baluartes hubieron salido de Jerusalén.

3 Fue por la mano de Elasá hijo de Safán y de Guemarías hijo de Hilquías, a quienes Sedequías el rey de Judá envió a Babilonia a Nabucodonosor el rey de Babilonia, diciendo:

4 “Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel, a todos los desterrados, a quienes he hecho ir al destierro de Jerusalén a Babilonia:

5 ‘Edifiquen casas y habiten [en ellas], y planten jardines y coman su fruto.

6 Tomen esposas y lleguen a ser padres de hijos y de hijas; y tomen esposas para sus propios hijos y den sus propias hijas a esposos, para que den a luz hijos e hijas; y háganse muchos allí, y no se hagan pocos.

7 También, busquen la paz de la ciudad a la cual los he hecho ir en destierro, y oren a Jehová a favor de ella, porque en la paz de ella resultará haber paz para ustedes mismos.

8 Porque esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: “No los engañen sus profetas que están en medio de ustedes, ni sus practicantes de adivinación, y no escuchen los sueños de ellos que ellos están soñando.

9 Porque ‘en falsedad les están profetizando en mi nombre. Yo no los he enviado’, es la expresión de Jehová”’”.

10 “Porque esto es lo que ha dicho Jehová: ‘Conforme se cumplan setenta años en Babilonia yo dirigiré mi atención a ustedes, y ciertamente estableceré para con ustedes mi buena palabra trayéndolos de vuelta a este lugar’.

11 ”‘Porque yo mismo bien conozco los pensamientos que estoy pensando para con ustedes —es la expresión de Jehová—, pensamientos de paz, y no de calamidad, para darles un futuro y una esperanza.

12 Y ustedes ciertamente me llamarán y vendrán y me orarán, y yo ciertamente les escucharé.’

13 ”‘Y ustedes realmente me buscarán y [me] hallarán, porque me buscarán con todo su corazón.

14 Y yo mismo ciertamente me dejaré hallar por ustedes —es la expresión de Jehová—. Y ciertamente recogeré a su cuerpo de cautivos y los juntaré a ustedes de todas las naciones y de todos los lugares a los cuales los he dispersado —es la expresión de Jehová—. Y de veras los traeré de vuelta al lugar del cual los hice ir al destierro.’

15 ”Pero ustedes han dicho: ‘Jehová nos ha levantado profetas en Babilonia’.

16 ”Porque esto es lo que ha dicho Jehová al rey que se sienta en el trono de David y a todo el pueblo que mora en esta ciudad, sus hermanos que no han salido con ustedes al destierro:

17 ‘Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos: “Aquí voy a enviar contra ellos la espada, el hambre y la peste, y ciertamente haré que sean como los higos reventados, que no se pueden comer por lo malos que son”’.

18 ”‘Y ciertamente seguiré tras ellos con la espada, con el hambre y con la peste, y de veras los daré para trepidación a todos los reinos de la tierra, para maldición y para objeto de pasmo y para algo de qué silbar y para oprobio entre todas las naciones a las cuales ciertamente los dispersaré,

19 debido al hecho de que no han escuchado mis palabras —es la expresión de Jehová— que les he enviado con mis siervos los profetas, madrugando y enviándo[los].’ ”‘Pero ustedes no han escuchado’, es la expresión de Jehová.

20 ”Y en cuanto a ustedes, oigan la palabra de Jehová, todos ustedes los desterrados, a quienes he enviado de Jerusalén a Babilonia.

21 Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel, respecto a Acab hijo de Qolaya y a Sedequías hijo de Maaseya, que les están profetizando falsedad en mi propio nombre: ‘Miren, voy a darlos en la mano de Nabucodorosor el rey de Babilonia, y él tiene que derribarlos ante los ojos de ustedes.

22 Y de ellos ciertamente se tomará una invocación de mal por parte de todo el cuerpo de desterrados de Judá que está en Babilonia, y se dirá: “¡Haga Jehová que seas como Sedequías y como Acab, a quienes el rey de Babilonia asó al fuego!”,

23 por razón de que se han ocupado en insensatez en Israel, y siguen cometiendo adulterio con las esposas de sus compañeros y siguen hablando falsamente en mi propio nombre la palabra que yo no les ordené. ”’“Y yo soy Aquel que sabe, y soy testigo”, es la expresión de Jehová’.”

24 “Y a Semaya de Nehelam dirás:

25 ‘Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: “Por razón de que tú mismo has enviado en tu nombre cartas a todo el pueblo que está en Jerusalén, y a Sofonías hijo de Maaseya, el sacerdote, y a todos los sacerdotes, diciendo:

26 ‘Jehová mismo te ha hecho sacerdote en lugar de Jehoiadá el sacerdote, a fin de que llegues a ser el gran superintendente de la casa de Jehová para con cualquier hombre enloquecido y que se porte como profeta, y tienes que ponerlo en el cepo y en la picota;

27 ahora, pues, ¿por qué no has reprendido a Jeremías de Anatot, que está portándose como profeta para con ustedes?

28 Pues por eso él ha enviado [un mensaje] a nosotros en Babilonia, diciendo: “¡Es [cosa] muy larga! Edifiquen casas y habiten [en ellas], y planten jardines y coman su fruto...”’”’.”

29 Y Sofonías el profeta procedió a leer esta carta a oídos de Jeremías el profeta.

30 Entonces la palabra de Jehová le ocurrió a Jeremías, y dijo:

31 “Envía a decir a todos los desterrados: ‘Esto es lo que ha dicho Jehová acerca de Semaya de Nehelam: “Por la razón de que Semaya les ha profetizado, pero yo mismo no lo envié, y trató de hacerles confiar en una falsedad,

32 por lo tanto, esto es lo que ha dicho Jehová: ‘Aquí voy a dirigir mi atención a Semaya de Nehelam y a su prole’.”’”‘Él no llegará a tener hombre que more en medio de este pueblo; y no tenderá la vista sobre el bien que estoy haciendo a mi pueblo —es la expresión de Jehová— porque ha hablado verdadera sublevación contra Jehová’”’”.