GENESIS 38:18 Contexto

Cuando Judá la vio con el rostro cubierto, la tomó por una prostituta.No sabiendo que era su nuera, se acercó a la orilla del camino y le dijo: —Deja que me acueste contigo.—Te mandaré uno de los cabritos de mi rebaño —respondió Judá. —Está bien —respondió ella—, pero déjame algo en garantía hasta que me lo mandes.—¿Qué prenda quieres que te deje? —preguntó Judá. —Dame tu sello y su cordón, y el bastón que llevas en la mano —respondió Tamar.Cuando ella se levantó, se fue inmediatamente de allí, se quitó el velo y volvió a ponerse la ropa de viuda.Más tarde, Judá envió el cabrito por medio de su amigo adulanita, para recuperar las prendas que había dejado con la mujer; pero su amigo no dio con ella.Entonces le preguntó a la gente del lugar: —¿Dónde está la prostituta de Enayin, la que se sentaba junto al camino?

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Referencia Cruzada de GENESIS 38:18