Biblia Online

La Palabra de Dios preservada y viva

1 REYES 3:26

“ En seguida, la mujer cuyo hijo era el vivo dijo al rey (porque sus emociones internas estaban excitadas para con su hijo, de modo que dijo): “¡Dispénsame, señor mío! Denle a ella el niño vivo. No vayan de ninguna manera a hacerlo morir”. Entretanto, la otra mujer estaba diciendo: “Ni mío ni tuyo llegará a ser. ¡Córtenlo!”. .”

Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)