“ Y ahora levántate, sal fuera y habla directamente al corazón de tus siervos, porque, por Jehová, de veras juro que, en caso de que no salgas, no se alojará ni un hombre contigo esta noche; y esto ciertamente te será peor que todo el perjuicio que te ha sobrevenido desde tu juventud hasta ahora”.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)