“ Finalmente ataron el pectoral por sus anillos a los anillos del efod con una cuerdecita azul, para que continuara por encima del cinturón del efod y para que el pectoral no se desalojara de encima del efod, tal como Jehová había mandado a Moisés.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)