“ ”’Solo que ninguna clase de cosa dada por entero que un hombre haya dado por entero a Jehová para destrucción de todo lo que sea suyo, sea de la humanidad o bestias o del campo de su posesión, podrá venderse, y ninguna clase de cosa dada por entero podrá recobrarse por compra. Es cosa santísima a Jehová.
.”
Traducción del Nuevo Mundo 1987 (tnm)