1 Así dice el Señor: «Observen el derecho
2 Dichoso el que así actúa, y se mantiene firme en sus convicciones;
3 El extranjero que por su propia voluntad se ha unido al Señor no debe decir:
4 Porque así dice el Señor: «A los eunucos que observen mis sábados,
5 les concederé ver grabado su nombre dentro de mi templo y de mi ciudad;
6 Y a los extranjeros que se han unido al Señor para servirle,
7 los llevaré a mi monte santo; ¡los llenaré de alegría en mi casa de oración!
8 Así dice el Señor omnipotente, el que reúne a los desterrados de Israel:
9 Animales del campo y fieras del bosque, ¡vengan todos y devoren!
10 Ciegos están todos los guardianes de Israel; ninguno de ellos sabe nada.
11 Son perros de voraz apetito; nunca parecen saciarse.
12 «¡Vengan, busquemos vino! ¡emborrachémonos con licor!