1 Entonces dije: «Escuchen, gobernantes de Jacob,
2 Ustedes odian el bien y aman el mal; a mi pueblo le arrancan la piel del cuerpo
3 ustedes se devoran a mi pueblo, le arrancan la piel, le rompen los huesos;
4 Ya le pedirán auxilio al Señor, pero él no les responderá;
5 Esto es lo que dice el Señor contra ustedes, profetas que descarrían a mi pueblo:
6 Por tanto, tendrán noches sin visiones, oscuridad sin presagios».
7 Los videntes quedarán en vergüenza; los adivinos serán humillados.
8 Yo, en cambio, estoy lleno de poder, lleno del Espíritu del Señor,
9 Escuchen esto ustedes, gobernantes del pueblo de Jacob,
10 que edifican a Sión con sangre y a Jerusalén con injusticia.
11 Sus gobernantes juzgan por soborno, sus sacerdotes instruyen por paga,
12 Por lo tanto, por culpa de ustedes Sión será como un campo arado;